Crespo – La titular del Juzgado Civil y Comercial Nº 9, María Gabriela Tepsich, dispuso remover al directorio de Miguel Waigel y Compañía de la administración de la empresa y colocar al frente de la dirección del negocio a los síndicos.
Mientras tanto, según la información del expediente se pone en marcha el proceso de salvataje de la firma que la legislación prevé. La decisión se tomó luego de que la familia Waigel no alcanzara las mayorías establecidas por la norma que establece la cantidad de acreedores y capital para reestructurar la deuda. Otra de las razones que la magistrada no dejó de señalar fue que la disposición tuvo en cuenta “la reiterada reticencia e incluso omisión por parte de la concursada en proveer la información requerida por ese tribunal y cumplir con las mandas judiciales en debido tiempo y forma”.
Tepsich definió el pasado miércoles remover de la administración de la empresa Miguel Waigel y Cia al directorio compuesto por Miguel Artenio; Nanci del Carmen; Maricel Alejandra y Miguel Francisco Artemio Waigel, y colocar al frente del negocio a los síndicos que intervinieron en el proceso. Ayer jueves, los integrantes del Estudio Cerini (Luis José Caviglia, Valentín J. Cerini y Abelardo J. M. Cerini) aceptaron la responsabilidad.
Según publicó APF, la decisión de la magistrada se basó en “la falta de obtención de las mayorías legales”, durante el período que los empresarios tenían para reestructurar la deuda de la empresa. Debían sumar 680 voluntades de los 1357 acreedores por un valor de $ 22,3 millones, y sólo presentaron 414 anuencias por un valor de ocho millones de pesos.
La determinación también tuvo en cuenta que se ha debido poner en marcha “la aplicación del instituto del ‘salvataje’ empresario el que, a su vez, abre un período de transición que amerita disponer tal medida extrema, con la finalidad de resguardar celosamente la actividad empresarial, tanto como el activo societario existente, evitando asimismo la incorporación innecesaria de nuevos pasivos”, sostuvo Tepsich.
Otra de las razones que la jueza no dejó de señalar fue que la disposición tuvo en cuenta “la reiterada reticencia e incluso omisión por parte de la concursada en proveer la información requerida por este tribunal y cumplir con las mandas judiciales en debido tiempo y forma”.
La titular del Juzgado ordenó también la apertura de un registro para que se inscriban “los legitimados interesados en la adquisición de las acciones de la concursada”, ya que Waigel y Cia es una sociedad por acciones, comprendida dentro de la última reforma de la ley de quiebras, que extiende la posibilidad de rehabilitar en negocio, incluso dejándolo bajo control de los trabajadores, a fin de evitar la quiebra, que es la realización del activo existente para cancelar, hasta donde alcance, el pasivo de la empresa fallida.
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