El ex gobernador Sergio Montiel fue la figura principal quien junto a otros dirigentes de la UCR reivindicaron las “políticas de Estado” de los gobiernos radicales. También hubo ironías dirigidas a otros partidarios como Atilio Benedetti. Todo en el marco del acto en conmemoración de los 22 años del gasoducto troncal.

“Obras para el futuro, políticas de Estado y progreso en la vida de los entrerrianos”, fueron frases que se escucharon en cada uno de los oradores a la vera de la Ruta 9 kilómetros 21, en Aldea Brasilera.
Indica radio LT14 que allí la dirigencia radical recordó los 22 años de la conexión del Gasoducto Troncal Entrerriano al sistema nacional, obra realizada durante el primer mandato de Sergio Montiel.
Varios pasaron por el pequeño escenario montado frente a los tubos de gas instalados en 1987. Uno de ellos fue el ex convencional Jorge Monge, quien recordó las obras realizadas por los gobiernos radicales y “su trascendencia”. Allí ubicó la ley de colonización, el Banco de Entre Ríos, la fundación de la Uader y la creación de las juntas de Gobierno. Estas tres últimas iniciativas fueron repetidas por cada uno de los que subieron al tablón.
Uno de los que también tuvo su espacio frente al micrófono fue el dos veces intendente de Larroque, Oscar Cánepa. El mensaje fue para Atilio Benedetti, quien a la misma hora recibía en su casa a otros dirigentes radicales.
La organización corrió por cuenta de la militancia radical de seis aldeas del departamento Diamante. Se vio a todos los radicales de ese distrito, incluso a la diputada electa, Hilma Ré, quien se sumó al bloque de la Coalición Cívica. La flamante legisladora escuchó gran parte de los discursos junto a Montiel.

“Estamos flacos de reconocimiento y débil de memoria”
Rodolfo Parente fue el más enfático y también irónico. “Estamos flacos de reconocimiento y débil de memoria”, lanzó, enojado, para enseguida aclarar que el acto que se estaba llevando a cabo no era otra cosa que “poner una placa que fue destruida”. Se notó el malestar de algunos dirigentes por el nuevo desplante del diputado electo que organizó un asado – según informó Página Política – de “carácter privado” en paralelo al recordatorio.
Parente se encargó de destacar la presencia de su coterránea que juró este jueves.
José María Miser también se sumó al coro de críticos que se juntaban en Larroque. “A los que no quisieron venir que recapaciten”, pidió el único diputado provincial presente. Todos los demás mandaron adhesiones. El dirigente de Paraná Campaña destacó los proyectos más emblemáticos de las gestiones montielistas.
El mensaje del Comité Provincial estuvo a cargo de Ricardo Troncoso. Bajo algunas gotas que amenazaron toda la jornada empezó por marcar el terreno o separar las aguas: “Estaba invitado a otro lugar por cuestiones de internas, pero es acá donde tienen que estar los radicales”, se despachó. Muchos murmuraban lo mismo.
Con tono ofuscado dijo haber sido “desvirtuado” en relación a las declaraciones que provocaron polémicas en el seno del radicalismo cuando destacó la relación que tiene con el Gobierno provincial en términos de gestión. “No pueden decir que quiero sacar los pies del plato de este partido cuando fui uno de los que le puso el cuerpo en los peores momentos y muchos se iban como ratas. Tengo siete hijos y uno ya es presidente de la Departamental”, se enojó el intendente de Macía, vicepresidente del Comité y presidente del Foro de Intendentas Radicales.
«Nunca se nos pegó nada», dijo Montiel
Llegó el turno del ex gobernador. Aplaudido por los afiliados y militantes de las aldeas cercanas, Montiel saludó a los que ya se habían acercado a darle la mano anteriormente: desde los dirigentes hasta los que armaron una cantina de ocasión que vendían cerveza, vino, gaseosa y choripán.
“Este partido, que tiene más de 100 años, ha luchado contra la vieja oligarquía, los militares y los gobiernos populistas que han terminado con el Estado”. Fue el prólogo de Montiel para desarrollar un discurso de no más 25 minutos en el que hizo un recorrido de todas las obras de integración dentro y fuera de la provincia. A todas las calificó como “políticas de Estado y federalistas”.
Otra gran parte de su oratoria la basó en la transparencia y la corrupción en la función pública. “Quién puede creer que Raúl Alfonsín pudo llevarse un alfiler al bolsillo. No es casualidad que hace unos meses el país lo acompañó en sus últimos momentos. Estaba despidiendo al símbolo de la honestidad”, dijo el veterano dirigente quien hizo aplaudir a todos los presentes. “Podrán acusarnos de cometer errores y por las maneras de actuar que tenemos, por supuesto, somos seres humanos. Pero nunca se nos pegó nada. Yo entré así a la Casa de Gobierno y así salí”, remarcó mostrando las manos. Más aplausos.
“Ninguno de los procesos que me abrieron estos señores tiene un problema económico o de inmoralidad política. Podrá haber algún error, pero no van a encontrar delito. Mal que les pese a estos adversarios de ocasión no van a conseguir en los radicales inmoralidades. Mantenemos esa fe en un país donde todo es negocio”, siguió Montiel, quien luego de terminar su discurso, un poco corrido por la llovizna, descubrió una placa en la obra que él mismo inauguró hace 22 años.
Por el Comité Provincial estuvieron Bruno Frizzo y Miguel Rettore, entre otros. Por el Comité Capital: Fabián Rogel y los presidentes de todas las seccionales.
También llegaron ex funcionarios como Jorge Krenz, Antonio Boleas, Osvaldo Cepeda y Rubén Villaverde. Se vio la cara del ex senador Hugo Lesca, lanzado a dar pelea para ser el candidato del radicalismo en 2011. Raymundo Kisser dijo presente.
Hubo adhesiones de la Juventud Radical, Arturo Vera, Marcelo Viola, Luis Kirpach, Atilio Benedetti y Carlos Cecco, que se disculpó por no haber podido estar presente.
Quienes no mandaron salutación fueron Sergio Varisco y Gustavo Cusinato. Se los había anunciado en Larroque.

(La Nota digital)

——————————–

Para suscribirte con $ 1500/mes a LNd hace click aquí

Tendencias