Me llega un estudio sobre la polémica desatada en torno al Fondo del Bicentenario —muy crítico a la posición del gobierno y aún más de la oposición– firmado por Claudio Lozano, en el que se lee, entre otros puntos, una visión alternativa del uso de las reservas y una breve caracterización de las posiciones de la oposición, que quiero compartir. Otras voces.
Tal como lo expresáramos durante el debate parlamentario del Presupuesto 2010, nuestra propuesta es utilizar la misma magnitud de reservas que tiene fijado el DNU oficial pero asociándola con la Creación de Riquezas, expresadas en la reconstrucción en serio de la estratégica industria ferroviaria (fomentando las industrias locales, conectando pueblos, reduciendo los accidentes viales y minimizando la contaminación ambiental), la puesta en funcionamiento de una Petrolera Estatal (que más allá de Enarsa permita capturar las extraordinarias ganancias de este sector), la recuperación de la Industria Naval y la constitución de un fondo para la Ampliación y Modernización Productiva. Se trata de transformar un activo monetario (como son las reservas) por un activo productivo (como lo son las líneas propuestas).
Es decir, en lugar de seguir esperando que la inversión productiva surja de la supuesta confianza de los inversores externos y locales, es el Estado el que debe promover la apertura de nuevas condiciones para los negocios productivos invirtiendo en las áreas estratégicas para el desarrollo económico. Desde nuestro punto de vista este es el uso prioritario que deben tener las reservas. No descartamos que las reservas (por ser un activo) puedan ser utilizadas para cancelar pasivos (deudas), pero ello siempre a condición de determinar primero la legalidad y legitimidad de los pasivos, y en segundo lugar de subordinarlos a la estrategia de desarrollo.
En referencia a la posición de la oposición política respecto del Fondo del Bicentenario, se lee en el documento de Proyecto Sur:
La propuesta de la Oposición Consentida y Conservadora es peor aún que la del Gobierno, porque en tanto impide el uso de reservas para cubrir el financiamiento, promueve en la práctica políticas de Ajuste del gasto público, como forma de resolver el financiamiento, o bien porque propone un endeudamiento a tasas mucho más elevadas y en cabeza del Tesoro.
El documento completo, acá.
Publicado por Artemio López













