En la zona del balneario «Los Arenales» de Paraná, una gigantesca muralla de aproximadamente cuatro metros de altura se levanta sobre la costa del río Paraná. Este muro separa las casas del barrio de Los Arenales de un proyecto de country privado, llamado “Amarras del Sol”, que es llevado adelante por el empresario Sergio Gregorio Lifschitz. El Defensor del Pueblo ya emitió un fallo que condena el muro y obliga a demolerlo.
En diciembre de 2010, el Defensor del Pueblo de Paraná, Luis Garay, elevó una recomendación al Ejecutivo Municipal, luego de que 54 vecinos le reclamaran que “la muralla les prohibía la vista al río Paraná, de la que han disfrutado durante toda la vida”. Además, Garay recibió una nota firmada por 700 vecinos que recolectó Ciudadanía Paraná (CP), y Jorgelina Londero (integrante de CP) expresó que la nota del ombusdman local “fue muy pertinente, muy completa y no descuida ningún elemento de análisis. No sólo incluyó todas las cuestiones técnico-legales de la construcción de un muro, sino que destacó lo que significa política y socialmente por la violencia, la exclusión y la desigualdad que genera”.
Londero indicó que “el muro de Los Arenales no sólo impide el acceso al curso del río que es de todos los paranaenses, no sólo discrimina a quiénes habitan la zona, sino que además deja un mensaje claro: cualquier privado con dinero puede tomar lo que el Estado abandona”.
Fuente: http://analisisdigital.com.ar/noticias.php?ed=1&di=0&no=145439
(La Nota digital)
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