El Defensor del Pueblo de Paraná, Luis Garay afirmó que el dominio de la zona en la que está ubicado el complejo privado Amarras del Sol propiedad del empresario Sergio Lifschitz, está «judicializado» por lo que defensoría no interviene, sin embargo sobre el muro perimetral aseguró que «sí toman intervención porque el municipio envió un pedido el 23 de septiembre del 2010 solicitando que se derribe el muro porque violaba lo que dice el código urbano».
El Defensor del Pueblo de Paraná, Luis Garay afirmó a radio La Voz: “Es un tema que se acercó a la defensoría en septiembre del año pasado, la señora Norma Bustos con una nota firmada por 57 vecinos de Los Arenales donde estaban muy indignados porque de un día para el otro empezaron a construir un muro muy grande y que no podían ver el río los vecinos de la costa, y además de eso hicieon un planteo sobre el dominio y donde estaba ubicado este complejo privado sobre la traza del túnel, yo hice un pedido de informe es una investigación sobre el tema antes de sacar una recomendación, y no intervine en el tema del dominio, este es un tema que se viene discutiendo judicialmente desde hace mucho tiempo, desde el año 1999, nosotros no intervenimos porqu está judicializado, no podemos dar una opinión como defensores en base a algo que la justicia no ha determinado todavía de quien es, si está bien comprado o no, o como fue el negocio, es un tema en el que no tomamos intervención”.
Luego aseguró a radio La Voz: “Con respecto al muro si tomamos interención porque pidiendo informes al municipio vemos que ya el 23 de septiembre el municipio había dado un pedido firmado en su momento por el funcionario municipal Loréfice pidiendo que se derribe el muro que porque violaba lo que dice el código urbano. Yo emito una recomendación el 6 de diciembre del 2010 diciendo y dando los fundamentos que porque se viola el código urbano. El código urbano establece que en ese tipo de complejos privados el cerramiento tiene que ser de alambre tejido y no puede tener una costrucción de material que obstruya la visión de un lado para el otro, porque el principio que tiene la ordenanza es que justamente hace una integración de la sociedad y no de exclusión, que es lo que justamente el muro divide, separa, aparenta que de un lado están los buenos, del otro lado están los malos, y así se puede comenzar a estigmatizar a parte de la sociedad diciendo yo estoy en esta parte del muro y vos estás en la otra. Entonces la idea nuestra es que no podíamos emitir otra opinión que no sea dentro de lo que es la legalidad, es decir que se respete lo que dice la ordenanza, y eso fue lo que hicimos”.
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(La Nota digital)














