Lo acusan de querer «demoler a mazazos» la Pastera Botnia, y de «incendiar» un surtidor de gasoil íntegro en Plaza de Mayo una año antes del conflicto por la 125. Es por la bomba molotov que tiraron el lunes frente a la Casa de Gobierno de Entre Ríos.

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Gobierno de Entre Ríos prorrogó vencimiento del inmobiliario rural

El gobierno de Entre Ríos prorrogó el vencimiento del impuesto para el 23 de abril, luego de que la dirigencia agropecuaria realizara una protesta frente a la casa de Gobierno provincial. El gobierno se comprometió a analizar la suba del impuesto en el lapso de la prorroga. Por bomba molotov un policía terminó herido.
Según los organizadores de la movilización en tractores, la mesa de enlace provincial, unos 2.500 empresarios agropecuarios marcharon contra el aumento del inmobiliario rural en la provincia de Entre Ríos cuyo vencimiento se producía este lunes 9 de abril.

Para quienes pagaran en término había un beneficio del 15 por ciento de quita en el impuesto situación a la que se habrían acogido unos 4.000 propietarios de campos, el 20 por ciento de los 20.000 que hay en la provincia, según datos suministrados oficialmente por el ente recaudador local.

En medio del tractorazo realizado este lunes frente a la Casa de Gobierno provincial por las entidades agropecuarias con Alfredo De Ángeli a la cabeza, una delegación de ruralistas -integrada por el propio de Ángeli, Alfredo Bel, y el representante de la Sociedad Rural, Luis Etchevehere- fue recibida por el vicegobernador José Cáceres y el ministro de Gobierno Adán Bahl.

Tras el encuentro se resolvió postergar el vencimiento del impuesto, y analizar el aumento conjuntamente con los empresarios en una mesa técnica compartida de carácter mixto, se entiende que para llegar a una acuerdo en el aumento.

Pero mientras los funcionarios del gobierno recibían a los dirigentes agrarios, se produjeron incidentes en las puertas de la Casa de gobierno, donde una bomba casera de tipo molotov hirió a un jefe policial.

El damnificado fue el director de Operaciones y Seguridad de la Policía de Entre Ríos, comisario general Sergio Rufiner, quien recibió heridas en su rostro cuando explotó molotov. “Fue algo impensado porque creíamos que tratamos con personas, no con delincuentes”, se quejó el uniformado.

De Angeli -el mismo que quería demoler a mazazos la Pastera Botnia, y a quien este cronista vio incendiar un surtidor de gasoil íntegro en Plaza de Mayo una año antes del conflicto por la 125- deslindó toda responsabilidad.

El Melli aseguró que “actuaron infiltrados” y sostuvo que “nosotros no marchamos para buscar incidentes”. En tanto que el diputado provincial Daniel Ruberto declaró a los medios locales que algunos productores generaron los incidentes cuando amenazaron con entrar a la Casa de Gobierno.

Al margen del hecho lamentable, el dirigente Alfredo Bel, también federado, aseguró que los aumentos en el impuesto representan una carga imposible de pagar para los pequeños productores.

Según reseñó el dirigente el nuevo impuesto implica que “vamos a tener que pagar aumentos de hasta el 500 por ciento”, lo que genera “mucha preocupación por parte de los productores ya que de 40 pesos por hectárea se pasa a pagar 200 pesos, o de 100 van a tener que pagar 400 pesos”.

En tanto el diputado provincial Juan José Albornoz aseguró que algunas filiales de la FAA se negaban a participar en la marcha porque se niegan “a ser usados por sectores que son latifundistas, que no tienen nada que ver con la organización que a ellos los agrupan”.

Desde la otra vereda el diputado nacional por Entre Ríos, Jorge Chemes (UCR), que también participó de la protesta, celebró la marcha atrás dada por el gobierno provincial con la prórroga en el vencimiento del impuesto.

Chemes calificó la marcha como “un éxito, porque conseguimos recuperar nuestra capacidad de hacer reaccionar al gobierno y lograr cambios en la política”.

Para el ex dirigente de CRA “en cuanto las autoridades vieron que había 2.500 productores movilizados frente a la casa de gobierno y que había auténtico enojo, decidió sentarse a negociar”.

De allí que el diputado reflexionó sobre el poder de presión de los productores: “Esto muestra que cuando los productores nos movilizamos unidos, podemos lograr que algunas políticas injustas cambien”.

Chemes también lamentó los incidentes y el saldo de un policía herido, pero como De Ángeli lo adjudicó a la presencia de “infiltrados” quienes a su entender “no guardaban relación con el sector agropecuario”.

Fuente: cra.org.ar

(La Nota digital)

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