El obispo de Gualeguaychú, Jorge Lozano, afirmó que “lo que queda en Concordia como en las otras ciudades donde hubo conflictos es una especie de sensación de pérdida de la amistad social, que eso tarda en recuperarse. Cómo el comerciante mira a los vecinos de su barrio que le han saqueado el comercio. Eso lleva tiempo recomponer. La gente hoy no tiene percepción de que haya riesgo de estallido social, pero lo que hubo sobre todo cuando han estado participando miembros de la fuerza de seguridad en algunos robos, esto genera una gran intranquilidad”.
El prelado dijo que “los problemas de planteos salariales que se realizaron en el mes de diciembre, algunas provincias lo han solucionado en el sentido de que acordar aumentos que dejaron conformes a las fuerzas de seguridad”.
Indicó luego que “para algunas de estas provincias el problema serio va a ser cómo solventar ese aumento que han acordado y de qué manera también enfrentar otros sectores de la comunidad de la provincia que también pidiendo aumentos semejantes: docentes, médicos, otros empleados públicos, con lo cual si todos piden el mismo nivel de aumento va hacer medio difícil que los presupuestos puedan acceder”.
Finalmente, monseñor Lozano destacó que “el argumento del gobernador Sergio Urribarri me parece que tiene que ver con un acuerdo firmado bajo presión, entonces dice ‘lo que hemos hecho bajo presión no es legítimo, hagamos un acuerdo nuevo que tenga que ver en una mesa de negociación como habitualmente debiera ser’. Ese es el argumento, yo no puedo decir si lo comparto o no, pero me parece que es razonable como argumento y creo que sí es bueno buscar canales para no llegar a niveles de conflictividad como se llegó en diciembre”, publicó El Once.
(La Nota digital)
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