Al radicalismo entrerriano lo manejan Macri y Nosiglia desde Buenos Aires.
«Cuando la noticia de lo que estaba por hacer un sector interno «Benedetti» el próximo viernes en Gualeguaychu, de definir él o sus amigos una alianza con el PRO, nadie entendía por qué, cómo esa información salió publicada primero en La Nación y Clarín, o sea en los medios nacionales.
Nadie entendía por qué, con el transcurrir de las horas, todos los teléfonos le sonaban a los dirigentes de la ILLIA y a Benedetti. Y éstos se vieron acorralados y tuvieron que contar la verdad. Macri a través de uno de sus operadores el señor Monzo, ex Radical, kirchnerista, Duhaldista y ahora Macrista, le comunicó a la dirigencia provincial de parte de Macri lo siguiente: Si ustedes no deciden y apuran la decisión ya por parte del Congreso partidario de arreglar con Macri, «nosotros vamos a salir a comprarle de a uno a los jugadores», en tono amenazante y a nivel de compadrito de Buenos Aires, le comunicó Monzo a Benedeti y le dijo «Sanz esta totalmente de acuerdo con ésto y necesitamos que Entre Rios aparezca como totalmente alineado con Macri antes que se reúna la convención Nacional», le aseguró.
Esta claro por estos días que Benedetti en su desesperación por mantener un protagonismo político que no debería tener, puesto que el 2011 protagonizó la peor elección de la Unión Cívica Radical de la historia, donde obtuvo el 17 % de los votos y en el 2013, nos mandó terceros.
A la vista está que la única estrategia que se le ocurrió es entregarle las llaves del radicalismo entrerriano al Macrismo. Inclusive desdiciéndose de lo que sostenía durante mucho tiempo que era hacer una gran acuerdo electoral donde estuviera el Macrismo, el Massismo y nosotros, para confluir en una gran PASO.
Es evidente «la apretada» que el señor Benedetti y sus amigos de la Illia han soportado y han permitido por estas horas al inclinar el partido en función de un acuerdo electoral unidireccional. Desdiciéndose de lo que venían sosteniendoo en todo este tiempo de convocar una gran PASO. Pero donde manda capitán no manda marinero. Enrique Nosiglia a través de Ernesto Sanz, hace mas de un año que está trabajando para destruir el partido, para que no tengamos candidato y haber roto UNEN. Son los que habilitaron desde el radicalismo que alguien tenga semejante audacia.
Audacia para recordar que quienes mantuvieron este partido por mas 120 años jamas se animaron. Ni Yrigoyen ni Alem, ni ninguno de los dirigentes entrerrianos con mucho peso político y respeto como Sergio Montiel, llevar el partido a posiciones personales que ya todo el mundo advierte y sospecha que es un negocio personal electoral o electoral personal para Benedetti y sus pocos amigos.
Un negocio del partido de la minoría.
Una cosa es que hagamos lo que tengamos que hacer para ganarle al kirchnerismo y otra es que algunos terminen haciendo negocios electorales».
Jorge Landra
(La Nota digital)















