En la causa que investiga la denuncia de Jorge Adolfo López, por supuestas torturas por policías en la Departamental Uruguay, procesó al comisario principal Eloy Fernández, quien era jefe de la División Operaciones al momento de los hechos.
Hubo novedades respecto al caso que investiga la denuncia de Jorge Adolfo López, por supuestas torturas que tiene involucrado a funcionarios policiales de la Departamental Uruguay, actualmente detenidos bajo prisión domiciliaria.
Con el avance de las investigaciones judiciales, se dispuso la liberación de uno de los suboficiales dado que fue desvinculado del hecho y se ordenó la detención de otro efectivo de la Sección Motorizada. En esa misma línea, según consignó el sitio 03442, se procesó al comisario principal Eloy Fernández, quien era jefe de la División Operaciones al momento de los hechos, ocurridos el 25 de mayo pasado en la zona de Sarmiento y 17 del Oeste del Barrio Bajada Grande de Concepción del Uruguay.
Las novedades fueron confirmadas por los abogados defensores de los efectivos policiales, Félix Pérez y Sebastián Arrechea.
Cabe recordar que la investigación de los hechos esté en manos de la fiscal Melisa Ríos y el denunciante tiene designado como abogado querellante al doctor Adrián Cabrera.
Respecto a la situación de los efectivos policiales procesados, Arrechea señaló que se está trabajando en la nueva solicitud de liberación, lo que podría ser presentado en las próximas horas.
Cabe recordar que la causa tuvo como involucrados en un principio, a dos oficiales y cinco suboficiales.
Los hechos iniciaron cuando López intervino en un incidente entre dos chicas; éste se encontraba trabajando en la casa de su hermano, cuando observó el suceso y comenzó a filmar el procedimiento, destacando este que lo hizo a pedido de uno de los uniformados. Momentos más tarde, se produjo el incidente en el cual López fue detenido, supuestamente por haber agredido a los uniformados, sufriendo numerosos golpes en todo su cuerpo, hechos que denunció ocurrieron durante el ingreso abrupto a la casa y durante su traslado y detención, lo que finalmente derivó en la denuncia por vejámenes y torturas.
La condena por el delito de torturas contempla penas de 8 a 25 años de prisión, considerado un delito tan grave como un homicidio simple.
(La Nota digital)
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