Un equipo del Conicet aporta al desarrollo de viviendas de madera en Entre Ríos.
Dos proyectos que procuran dinamizar economías regionales en base al recurso forestal se desarrollan en forma conjunta entre el Cofecyt y el Estado provincial.
Indica la gacetilla oficial que dichas iniciativas se llevan a cabo en el marco de los proyectos Federales de Innovación Productiva del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología — Cofecyt, en conjunto con la Secretaría de Ciencia y Tecnología de Entre Ríos, dependiente del Ministerio de Producción.
El equipo de profesionales del Centro de Investigaciones y Estudios Sobre Cultura y Sociedad (Conicet-UNC), dirigido por Paula Peyloubet, Investigadora del Conicet, desarrolla junto a la Cooperativa Agrícola Productores del Delta y la Escuela Técnica Augusto Widman, de la localidad de Villa Paranacito, un sistema constructivo en madera de álamo teniendo en cuenta el perfil productivo específico local.
“Dicho sistema constructivo está conformado por componentes estructurales, prefabricados y estandarizados, que se producen sobre matrices en taller, asegurando la calidad y estabilidad dimensional”, expresó la investigadora, y agregó: “El desarrollo tecnológico en Paranacito se lleva a cabo en el marco de un proceso colaborativo, en el que se articulan saberes diversos, signado por un espíritu de solidaridad cognitiva que da como resultado un producto de alta calidad con un gran potencial productivo y comercializable. En la actualidad se construye un prototipo modelo que podrá visitarse próximamente”.
A su vez, el mismo equipo de investigación de Conicet ha desarrollado en Concordia, junto a la Asociación de Carpinteros y el gobierno municipal, un sistema constructivo en madera de eucalipto de la región que posee Certificación de Aptitud Técnica (CAT N° Exp. S02-0098701/16) otorgado por la Secretaría de Hábitat de la Nación. En base a esa tecnología se han construido viviendas, salones de usos múltiples y galpones de grandes luces, a partir de algunas adaptaciones tecnológicas y consideraciones estructurales.
Ante esto, Peyloubet indicó que “este sistema constructivo también se ha logrado en el marco de un proceso colectivo de colaboración cognitiva que promueve una producción socialmente incluyente y ambientalmente amigable. Gracias a ello, este sistema recibió el Premio INNOVAR 2019”. “Actualmente se construye un secadero solar para madera utilizando este sistema constructivo adaptado a la funcionalidad del nuevo desafío”.
