El 4 de abril 2016 a la siesta, sucedió en La Paz la peor inundación y desborde de los arroyos que se recuerda.
Evacuados por todos lados, pérdidas materiales innumerables y la solidaridad de un pueblo que se activó de inmediato. Esto fue contagioso en el resto del país y comenzamos a recibir camiones de donaciones de particulares y ONGs que se hicieron presentes. Toneladas de donaciones se clasificaban y entregaban por paceños de a pié identificados con el dolor de los vecinos.
Y el Estado? El Estado Municipal ubicó a la gente en centro de evacuados y coordinó en parte las entregas de las donaciones y ayudas. El Estado Provincial concentró las donaciones en las manos del Senador provincial del momento quien las repartió a su arbitrio. El Estado Nacional… Prensa y show. Nos visitó el Presidente Mauricio Macri, la Ministra de Acción Social Carolina Stanley, el Ministro del Interior Rogelio Frigerio y el Ministro de Agricultura Ricardo Buryaile … que trajeron… Promesas de un barrio que no fué…

Todos los evacuados fueron volviendo como pudieron a sus casas… La gestión del actual intendente Sarubi, luego de haber contado con el apoyo directo de la plana mayor del gobierno nacional de su mismo partido, no logró solucionar nada de fondo. El agua bajó, la gente se arregló como pudo; para Diciembre de 2016 quedaban aún 15 familias en centros de evacuados. La solución “ temporaria para siempre” fue ubicarlos en unas casillas de madera en el predio del ex cuartel.

Luego de 5 años estas familias siguen allí. El barrio “promesa” del ex Presidente Macri y del Intendente Sarubi de un comienzo se redujo de 300 a 100 viviendas que comenzaron en Junio de 2017 y nunca se terminaron. La falta de gestión municipal y su incapacidad de resolver problemas reales hicieron que estas familias continúen en el mismo lugar, con sus instalaciones deterioradas debido al paso del tiempo y a la precariedad de las construcciones de madera. En 5 años no solo no lograron gestionar los fondos para terminar el barrio, sino que tampoco avanzaron en los servicios para estas futuras viviendas, ese predio no tiene ni agua ni cloacas.

5 años después, los únicos olvidados de la tragedia del 2016 son las familias abandonadas en las casillas que miran todos los días un barrio inconcluso que algún dia les pertenecerá si logramos superar la inoperancia de los políticos de turno.

(*) Agrupación Las Bases – 4 de abril de 2021